La seguridad aeroportuaria
Desde 1948, con el primer secuestro aéreo (un hidroavión, y se consideró un acto de piratería a falta de un término específico), el sector del transporte aéreo se ha convertido cada vez más en el objetivo de actuaciones malintencionadas que buscan atentar contra la seguridad de personas, mercancías e infraestructuras, a estas actividades las llamamos actos de interferencia ilícita, y se definen como "los actos y tentativas destinados a comprometer la seguridad de la aviación civil y el transporte aéreo", y son los siguientes:
- Apoderamiento ilícito: secuestro de aviones en vuelo o en tierra.
- Destrucción de una aeronave en servicio.
- Toma de rehenes a bordo de aeronaves o en los aeropuertos.
- Intrusión por la fuerza a bordo de una aeronave, en un aeropuerto o en el recinto de una instalación aeronáutica.
- Introducción a bordo de una aeronave o en un aeropuerto de armas o de artefactos (o sustancias) peligrosos destinados a fines criminales.
- Uso de una aeronave en servicio con el propósito de causar la muerte, lesiones corporales graves o daños graves a los bienes o al medio ambiente.
- Comunicación de información falsa que comprometa la seguridad de una aeronave en vuelo o en tierra, la seguridad de los pasajeros, de la tripulación, del personal de tierra o del público en un aeropuerto, o del recinto de una instalación de aviación civil. Por ejemplo, un falso aviso de bomba.